Cuando eres músico como yo, te hartas literalmente de escuchar todo tipo de música. Todos nos decantamos por alguna en concreto, y como ya hablé de Infinity de Guru Josh, hoy vamos con algo más cañero.
Durante muchos años he considerado la guitarra como un mundo del que nunca llegaría a aprender todos sus secretos. Así será, soy consciente y no me importa. No pasa nada si no consigo tocar los acordes imposibles de Frank Zappa ni alcanzo la técnica única de Eddie Van Halen, quien en sus conciertos llegaba a tocar de espaldas al público para que nadie supiera cómo hacía las barbaridades (en el buen sentido de la palabra) que hacía.
Para mí siempre ha habido tres grandes monstruos de las seis cuerdas desde que tengo noción del instrumento. Joe Satriani, Steve Vai y el recientemente desaparecido Paco de Lucía. Por supuesto, son únicos en lo suyo, y son únicos no solo porque sean los mejores tocando, sino por demostrarlo con cada álbum que sacan al mercado. Una vez conocí a un guitarrista, decían que de los mejores de Galicia, y al cabo de un tiempo me enteré de que había tardado seis meses en ser capaz de tocar la canción que os ofrezco a continuación. Yo no creo que haya para seis meses, pero lo comprobaré en su momento. Viendo montones de covers en YouTube con gente imitando más fatal que mal la canción, me extraña. Entonces, Manuel, es que no eres uno de los mejores guitarristas de Galicia. Ni de ninguna otra parte.
Esta canción no es como las demás. Lejos de la ametralladora humana de Yngwie Malmsteen y de las oscuras melodías de Vai, casi podía definirse el tema como un medio tiempo. Guitarra de la buena, pero sin convertirse en un espectáculo en el que solo la guitarra eléctrica solista es la protagonista de la historia. Un buen apoyo instrumental y el que muchos consideramos como el mejor "tapping" que se ha hecho jamás en una guitarra eléctrica.
¿Qué es un tapping? Busquen en Wikipedia. Hay un artículo, incompleto pero interesante, acerca de en qué consiste la técnica sobre la guitarra.
De momento dejo esta perla, en la que el tapping llega justo con el clímax de la canción. Una verdadera maravilla que, casi veinte años después, todavía le piden a Joe Satriani a voz en grito durante sus conciertos.
Joe Satriani- Always with me always with you
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